Todos somos un poco filósofos y nos gusta plantearnos cuestiones generales tipo ¿Quiénes somos?, ¿Qué significa ser feliz? o ¿Puede ser buena una mentira? Por eso creo que el tema que hoy os propongo puede resultar interesante a mucha gente muy variada. Eso sí, como mínimo han de tener unos 15-16 años y el nivel A2 avanzado o superado. Se trata de una unidad comunicativa, centrada en vocabulario y expresión oral más que en contenidos gramaticales. Sirve para recordar diversos conectores del discurso, cualidades de carácter, emociones y sentimientos. Podéis fácilmente adaptarla a vuestros grupos y alumnos. Incluso su duración es flexible, de entre 45 y 60, o más, minutos. La hoja de trabajo la podéis descargar aquí.
1. Trabajar el vocabulario (y la expresión oral)
La primera parte de la clase la dedicaremos a repasar, explicar y matizar el vocabulario. Son las actividades del bloque 1 y se pueden adaptar en función del nivel del grupo con el que trabajáis. Si vuestros alumnos todavía no han superado el nivel A2, propongo que hagáis la actividad 1.1: relacionar palabras con sus definiciones ya dadas. Pero si trabajáis con alumnos de nivel B1 (o superiores), podéis invitarles a que ellos mismos, con sus propias palabras, traten de explicar qué significan los diversos términos que aparecen en la silueta humana. No es tarea fácil pues se trata de definir palabras abstractas, pero sus recursos lingüísticos son suficientes para hacerlo.
A continuación todos los grupos deben trabajar las actividades 1.2 y 1.3. Yo creo que lo mejor es hacerlo en grupo grande, pero si creéis que es mejor trabajar en parejas o individualmente y después poner los resultados en común, también se puede. La finalidad seguirá siendo la misma: utilizar – primero de forma pasiva (analizando un término dado) y después activa (dando nuestros propios ejemplos) – ejemplos concretos para verificar si y estar seguros de que entendemos bien el vocabulario.
Fijaos que algunos ejemplos propuestos pueden tener más de una respuesta. El color de pelo por ejemplo es cuestión de genética, pero también puede deberse a una decisión libremente tomada. Está bien que este tipo de discrepancias vaya saliendo a la luz pues será un buen entrante antes del debate principal.
2. El debate – más y más expresión oral
Es la hora del plato principal de la clase: el debate.
Pedid que los alumnos escojan los 3 “componentes” (de entre el vocabulario repasado y conocido en la primera parte de la clase) que, en su opinión, más nos definen, haciendo de nosotros las personas que somos. Kasia/Marek/Wojtek, ¿tú crees que tú, tus padres, amigos, etc. sois más vuestras decisiones, vuestros sentimientos, vuestros genes?
Estoy segura que las respuestas serán muy variadas, sobre todo si trabajáis con gente de diferentes edades. Pero para que vuestros alumnos logren expresar bien lo que piensas, no se os olvide pedirles que piensen en ejemplos concretos que les hacen pensar lo que creen. Que piensen en personas y sucesos concretos, por ejemplo cuando vieron que una persona tomaba decisiones importantes sólo a base de las emociones o, al revés, cuando negaba sus sentimientos y actuaba únicamente en función de su voluntad. Hablar en abstracto puede ser demasiado difícil, sobre todo para gente de nivel A2.
Repasad también los conectores del discurso, animad a vuestros estudiantes a utilizarlos – al menos algunos – durante el debate.
El resto depende de vosotros. Seréis los moderadores del debate y podéis desarrollarlo de la manera que más os plazca (y en función de las capacidades e intereses de vuestro grupo, claro). Aquí, en la hoja de trabajo para profes, os apunto algunas cuestiones y preguntas que podéis plantear a la gente. Pero, ni mucho menos, son las únicas. Puede ser también que sean vuestros alumnos a quien se le ocurran temas interesantes a debatir. Sobre todo si trabajáis con alumnado de niveles avanzados, invitadles a participar activamente en el debate. Que planteen sus propios temas a hablar.
El debate podrá durar entre 10 y 30 minutos y sin duda determinará el desarrollo de la clase. Es la parte más flexible, e imprevisible, de la unidad.
3. La guinda del pastel
Independientemente de cómo os salió el debate, y si tenéis tiempo y ganas, vale la pena tratar de hacer también la actividad número 3. Es una actividad extraída del libro de texto Aula Internacional 1 de la editorial Difusión y creo que puede ser un buen complemento – y contrapeso – de los ejercicios anteriores. Sus objetivos son distender la clase, hacer a la gente reír y conocer un poco de cultura latina.
Si el debate salió genial, los alumnos estarán cansados y les conviene relajarse con algo más “ligero”. Preguntadles si, teniendo en cuenta todo lo que habéis hablado durante el debate, creen que los horóscopos tienen sentido, si se puede definir el carácter de una persona sabiendo tan sólo su fecha de nacimiento (si el carácter, la personalidad pueden ser “predeterminados”). A continuación invitadles a leer la descripción de su propio signo maya. Algunas irán como anillo al dedo, otras no, pero os garantizo que se creará un buen ambiente, más relajado y lúdico. También podéis pedir que trabajen en parejas.
Si el debate no ha salido demasiado bien – la gente no se atrevía a participar, tenía poco que decir, etcétera – la actividad podrá servir para “cubrir el fracaso”. Empezad con la misma pregunta, como si fuera parte del debate: ¿Tienen los horóscopos sentido?, ¿Se puede definir el carácter de una persona sabiendo tan sólo su fecha de nacimiento? Y continuad con la lectura de las descripciones (individualmente o en parejas). Además, los autores del Aula proponen la actividad C que también me parece muy interesante. Aunque no os haya ido bien con el debate, sin duda podréis decir que habéis repasado y trabajado de sobre el vocabulario relativo al carácter.
Yo trabajé esta unidad didáctica con un grupo de dos alumnos de nivel A2/B1. Nos salió muy bien, de hecho no nos dio tiempo para hacer el horóscopo maya. A ver qué tal os ha ido a vosotr@s. Si queréis compartirlo, apuntar algo o criticar mi propuesta, no dudéis en escribir a la dirección de kontakt@espanolparati.pl
